La Insulina - Tratamiento
Puede ser aterrador enterarse de que es necesario un tratamiento con insulina para controlar su diabetes. Puede sentirse culpable por no haber logrado administrar adecuadamente su nivel de glucosa, o incluso por tener que inyectarse y preocuparse por el cambio que la terapia de insulina pueda causar a su estilo de vida.
Es importante recordar que la diabetes de tipo 2 es una condición progresiva. Su control implicará una jornada de tratamiento que inicia con cambios en su patrón de dieta y ejercicio. A medida que pasa el tiempo, es necesario comenzar a tomar pastillas, combinar tratamiento y, posteriormente, iniciar la terapia con insulina. Si usted tiene diabetes de tipo 2, a lo mejor su organismo no produzca suficiente insulina o sus células no la utilicen adecuadamente. El objetivo de la terapia es reemplazar la insulina que su cuerpo naturalmente producía, por medio de inyecciones.
Es natural preocuparse por la inyección, en especial al principio del tratamiento. Ponerse una inyección nunca será agradable y puede ser o no ser dolorosa. Sin embargo, en algunos casos las personas con diabetes se dan cuenta de que las inyecciones son prácticamente indoloras. El equipo médico será capaz de guiarlo a través del uso de la insulina, ya que hay muchas formas de reducir el dolor de las inyecciones, lo que hará que su terapia sea lo más cómoda posible.
Puede ser difícil acostumbrarse a las inyecciones de insulina durante las fases iniciales de la terapia. Es posible que le preocupe que las inyecciones afecten la forma en que vive su vida. La mayoría de las personas dicen que, en un corto período de tiempo, desarrollan una nueva rutina que incluye la terapia con insulina y una vida flexible y plena.
Si se siente culpable o preocupado por el aspecto general del tratamiento, es importante que se lo exprese a su equipo médico. Ellos serán capaces de explicarle las razones por las que necesita insulina, como también administrar el tratamiento y la mejor manera de integrarlo en su rutina diaria.