La Diabetes Infantil
Es común que los bebés en esta franja etaria tengan manías con los alimentos, tales como rechazarlos. En realidad, este comportamiento se puede considerar casi normal para los bebés, aunque a menudo sea molesto y frustrante para los padres. No es de sorprenderse que problemas como estos provoquen más ansiedad a los padres de un niño con diabetes. En tal caso, los consejos a seguir pueden ser útiles.
- La mayoría de los niños crecen y se desarrollan sin que les digan cuánto deben comer. No se preocupe. Incluso si piensa que su hijo no está comiendo lo suficiente, es muy probable que lo esté. Hable con su nutricionista y su equipo de atención médica si se siente preocupado y verifique con su pediatra el desarrollo de su hijo de acuerdo con la tabla de crecimiento.
- Si la rigidez de las comidas y las meriendas no funcionan bien, trate de pensar qué tipo de comida le habría dado si su hijo no tuviera diabetes y trate de ajustar la insulina de acuerdo con este criterio.
- Planifique las comidas y los menús teniendo en cuenta otras actividades del niño, por ejemplo: ¿el niño corre por todas partes o permanece sentado?
- Los niños nunca responden si son alimentados por la fuerza. Aunque pueda ser difícil, trate de disminuir el énfasis en la comida. Por lo general, una caída en el nivel de azúcar en la sangre hará que el niño sienta más hambre y quede más propenso a comer.
- Evite el uso de alimentos dulces o bebidas azucaradas para enmascarar una baja ingesta de hidratos de carbono. Los niños aprenden con rapidez a rechazar la comida si la "recompensa" es una bebida dulce o una galletita de chocolate.
- Una fruta fresca para la merienda es mejor que beber jugo de fruta.
- Suministre una dosis extra de insulina en el niño cuando sea necesario, por ejemplo, en fiestas de cumpleaños o cuando coman dulces.
- El desayuno puede ser difícil, pues es muy común que los niños no tengan hambre en esta hora. Deles un vaso (o medio vaso) de jugo o leche para empezar. Después de media hora aproximadamente, cuando el nivel de glucosa se haya elevado un poco, el apetito podrá mejorar.
- El gel de glucosa o los jugos pueden ser muy útiles en esta franja etaria, pues los niños no necesitan masticar pastillas de glucosa cuando están hipoglucémicos.
- Los bebés de 1 a 2 años están en crecimiento y pueden, a menudo, cambiar sus hábitos alimentarios. Hable con su nutricionista para obtener más información.